martes, 29 de abril de 2014

Muchos son los emprendedores ven ahogadas sus ilusiones de un negocio propio por los altos costos que implica la renta de un local comercial.

Se que ahora te estarás preguntando: ¿Cuándo entonces, me conviene arrendar un local para mi negocio?



Y no es para menos pues son varios los factores que se deben considerar antes de rentar un local u oficina para tu negocio.




Muchos emprendedores se afanan y caen en trampas financieras por el hecho de pensar que necesariamente necesitan un local comercial para que su negocio camine sobre ruedas.

Lo cual es un mito, y desde luego que esa debe ser una de las metas, sin embargo como tal, debe ser planificada y programada para lograrlo gradualmente y al ritmo de crecimiento del negocio.

Así pues, hoy te comparto al menos 10 razones por las que NO necesitas un local comercial al iniciar tu negocio:

  1. Arriendo demasiado altos. La renta de un local varía de acuerdo a su ubicación. Si el tráfico de personas es mayor la renta también lo será. Esto puede ser una ventaja siempre que se aproveche ese tráfico ofreciendo productos ideales para el tipo de mercado que circula. De lo contrario, el alto costo de la renta puede ahogar tus ingresos.
  2. Costos de acomodación del local. Dependiendo del tipo de local, oficina o kiosco que busques, en muchos casos el arrendante te ofrece el mismo con la condición de que le hagas las adaptaciones físicas que necesite, y que pueden ser: iluminación, piso, líneas telefónicas, pintura, decoración.
  3. Costos de publicidad. Luego de arrendado y acondicionado tu local, entonces debes hacer que se vea. Y esto implica otros costos como publicidad y rotulación. Debes considerarlos dentro de tu presupuesto.
  4. Costos legales de arrendamiento. Dentro de la renta del local regularmente deberás considerar los costos del contrato de arrendamiento así como los depósitos correspondientes por concepto de garantía para daños y protección del arrendante. Esto equivale regularmente a una o dos rentas adicionales. Esto sin mencionar los costos de investigación de referencia de crédito que te realizan.
  5. Costos de mantenimiento. También debes de considerar los costos de mantenimiento del local que regularmente son cuotas establecidas por los centros comerciales o edificios donde arrendas tu local.
  6. Costos de seguridad. Adicionalmente, dependiendo de la zona o ubicación del mismo, también debes incluir costos de vigilancia y seguridad para el resguardo de tus bienes. Esto incluye servicios de patrullaje, alarmas, circuitos cerrados de cámaras, etc.
  7. Cumplimiento de contratos. Regularmente los contratos de arrendamiento son de uno o dos años como mínimo, lo cual representa un compromiso a largo plazo. Si en algún momento tu negocio no despegara como lo tienes proyectado, esto puede convertirse en una carga muuuy pesada de la que será difícil despojarse.
  8. Cumplimiento de horarios. Ya sea porque el centro comercial lo requiera o porque tus mismos objetivos de ventas lo necesiten, usualmente te verás forzado a cumplir con ciertos días y horarios mínimos que indirectamente pueden significar la contratación de personal para atender tu negocio. Debes considerar estos costos en tu presupuesto.
  9. Restricciones comerciales. Recuerdo que hace algunos años tuve una tienda de accesorios de computación en un local dentro de un supermercado. En un momento dado, quise implementar la venta de teléfonos celulares y recargas de tiempo pero la administración del supermercado me lo impidió con el argumento de que nos convertíamos en competencia directa de ellos. Así que no tuve alternativa. Debes tener muy claro las restricciones posibles que el arrendante establezca.
  10. Mercado inapropiado. Cuando rentas un local, debes realizar un estudio de mercado que te garantice que el tráfico de personas que pasarán frente a tu negocio es el apropiado para tu producto. Rentar un local donde la gente no se interesa por tu producto o simplemente no pueden pagarlo, solo singificará pocas ventas y a la larga, cargas financieras que podrías haber evitado.

Y la respuesta es mas sencilla de lo que parece. Es conveniente rentar un local cuando estés plenamente consciente de los costos que immplica y estes preparado financieramente para soportarlos.

Y desde luego, hay negocios que si requieren un local, pero la mejor forma de absorber los costos es desarrollando una estrategia de ventas que te permita crear, identificar y llegar a un mercado de clientes que sencillamente estarán encantados con tu producto.
el crecimiento de tu empresa debe ser gradual, planificado y evaluado con regularidad para que tus pasos sean seguros hacia el éxito.

Finalmente recuerda que muchas de las grandes empresas multimillonarias de hoy en día como Amazon, Ebay, Facebook y Google, nacieron en la universidad o en el garaje de la casa de sus propietarios. No adquirieron oficinas hasta que el negocio había comenzado a rodar y entonces tenían la capacidad financiera para soportar dichos costos
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miércoles, 23 de abril de 2014

hoy la labor del Community Manager (CM) empieza a reconocerse y valorarse


A diferencia de hace unos años, hoy la labor del Community Manager (CM) empieza a reconocerse y valorarse, gracias a que el mismo trabajo se ha profesionalizado con técnicas y procesos que permiten una mejor gestión de las comunidades en Internet.
Para algunos, el trabajo de Community Manager parece muy sencillo por el hecho de pasar gran cantidad de tiempo en las distintas redes sociales, y sí, efectivamente pasan mucho tiempo ahí, pero no hacen lo que todos con nuestros perfiles personales.
Un CM es el responsable de la comunicación oficial de una marca en medios sociales, lo cual es mucho más complejo porque todo lo que se publica y responde debe alinearse a lo que la marca desea transmitir o quiere dar a conocer, y simplemente no puede salirse de esa línea.
Por lo cual, a continuación comparto ocho tips que, desde mi perspectiva, pueden mejorar considerablemente el trabajo de un Community Manager, para hacerlo más profesional y efectivo.
1. Los seguidores de tus marcas, no son tuyos
Algunos CM cometen el error de adueñarse o encariñarse de más con las cuentas que manejan, lo que considero un error porque todo lo que suceda con ellas pudieran tomarlo personal, incluidas las quejas y los reclamos. Un CM profesional debe tener claro que las cuentas no son eternas y podrán irse o cambiar por otras.
Obviamente todos tenemos preferencia por alguna en particular, pero no es lo mismo hacer el mejor esfuerzo para que las cuentas sean un éxito, que tomarlas como propias y manejarlas como si fueran nuestro perfil personal.
2. Diseña un plan de manejo de crisis
Lo peor que le puede pasar a un CM es no saber qué hacer en una crisis, por eso es importante contar con un plan de acción que incluya a quién acudir y qué decir, al menos para las situaciones negativas más comunes. Contar con un plan de manejo de crisis previene la improvisación en situaciones complicadas.
La mejor manera de iniciar un manual es considerando las situaciones que ya hemos vivido, junto con las mejores soluciones para cada caso, así como un aprendizaje o reflexión para considerar en el futuro.
3. Conoce a detalle el algoritmo de Facebook
Facebook ha realizado actualizaciones frecuentes de su algoritmo en los últimos 12 meses, de ahí que es crucial conocerlas, junto con los cambios, para determinar las acciones a seguir en cada caso.
En el siguiente link la más reciente actualización del algoritmo de Facebook
4. La ortografía y redacción sí son importantes
Por obvio que parezca, la ortografía y redacción son indispensables para el trabajo de un Community Manager, ya que las publicaciones se hacen en nombre de su cliente o empleador, no a título propio, así que hay que cuidar al máximo estos temas.
5. Encuentra la frecuencia adecuada
Publicar de más o menos puede afectar directamente la interacción, por ello es importante encontrar la frecuencia de publicación adecuada para enganchar bien con la audiencia, sin cansarla, para que logre la comunicación deseada.
Para determinar la frecuencia existen varios métodos, pero el más sencillo es calcularla en función de la respuesta que hemos tenido, considerando los días y horarios de mayor interacción en el último mes, para conocer los momentos e intervalos de tiempo que debemos considerar al publicar. Vale la pena decir que cada cuenta tiene sus tiempos, según su propia audiencia.
6. Define el estilo de cada cuenta
Este punto es importante ya que a partir de aquí se determina cómo se va publicar cada cuenta, de acuerdo con sus características específicas.
Por ejemplo, la cuenta en Twitter de un despacho de abogados no tendrá el mismo estilo de publicación que la cuenta de una Pizzería. La diferencia no la hace el tamaño del negocio, sino su rubro o especialidad, a qué público se dirige y en qué circunstancia lo hace.
Encontrar el estilo de cada cuenta será el diferenciador contra la competencia y se convertirá en un argumento para seguirla y recomendarla.
7. Utiliza las herramientas adecuadas
Aunque en lo personal estoy convencido que el trabajo de un Community Manager es en gran medida creativo, no puedo negar que las herramientas pueden facilitar, e incluso impulsar, el trabajo de manera significativa.
Los CM en primer lugar deben buscar herramientas para optimizar el proceso de publicación, ya que con la opción adecuada su trabajo puede ser mucho más rápido y eficiente.
Existe gran variedad de herramientas para este fin, algunas son: Hootsuite Peoplebrowser, y la que recientemente ha llamando la atención, Adobe Marketing cloud.
8. Planifica y optimiza tiempos
La organización de tiempos es todo un tema para un Community Manager, ya que algunos tienen muchos tiempos muertos, mientras que a otros no les alcanza el día para realizar el trabajo.
Parte de la solución y organización del tiempo es la planificación de mensajes, donde el contenido generado con anticipación se programa en cada perfil para que se publique en el día y hora seleccionados, lo cual ahorra tiempo.
Crear un calendario editorial también ayuda a optimizar los tiempos, de esta manera es más sencillo encontrar o generar los contenidos a publicar, así como evitar pérdidas de tiempo.
El conocimiento que no se comparte, pierde por completo su valor